Desde ahora escribire, a aquella mujer que me incendio.
Se llama Niña imantada. La muchacha del vestido rojo
y los ojos de eclipse...
Un gusto.
martes, 16 de junio de 2009
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Yo no puedo aconsejarte, ya es muy duro lo que llevo, dejemos que corra el aire y digámonos adiós. Aunque sigas suspirando por algo que no era cierto, me lo dicen en los bares, es algo que llevas dentro. Que no quieres que te quieran, sólo quieres que te abracen y publicas que no tuve ni valor para quedarme, yo rompí todas tus fotos, tú no dejas de llamarme. ¿Quién no tiene el valor para marcharse? ¿Quién prefiere quedarse y aguantar?...
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