Y en tus ojos, Amor Mio, simplemente en tus ojos.

Oh!, Copia ancestral de un eclipse lunar,
Señorita de los labios palpitantes,
La mirada constante,
Tu vestido rojo combina perfectamente con tu alma vislumbrante.

Niña imantada, piel de neón,
Tus manos caen en mi arenal como el suave roce de una rosa,
Tu pelo desplegándose en la incertidumbre,
Me invade apaciguadamente, Intensamente,
Subyagandome a tu simple serenidad angelical.

Oh amor de incendios, de tardes de una calurosa nieve de verano,
Tu rostro vilipendiando a los malditos,
Es un milagro que tu calor lo pueda sentir un desgraciado como yo.

Y me embriago plenamente en tu pasión de noches crepusculares,
Invéntame un nuevo juego de felicidad contemporánea,
Incentívame a pecar nuevamente,
Realizar maniobras de escapismo.
Mi amor, el verdadero amor espera…
Espera…

La dicha de este títere de sintetizar tu sonrisa en una sola imagen gradual,
¿Por qué no sonríes más seguido, cariño?.
Tu boca formándose como una brillante U,
Es la medicina perfecta para los adoloridos Ángeles caídos a tu alrededor
– ¡Uno de ellos soy yo! –

Déjame abrazarte, te juro que en cada latido destronare a la inseguridad de tu cuerpo,
Enfaticemos cada pensamiento de amor,
En un cuadro retrospectivo de la tarde mágica,
Imagina que este mundo no es una basura,
Emancifica los juicios personales positivos,
Inventa. Inventemos, nuestro propio universo claroscuro.

Sonríeme, es mi necesidad personal,
Tu silueta despegando en la luna,
Tus ojos de fuegos lunares,
Tu amor de simples palabras,
Déjame abrazarte por última vez
Sentir tu suave aroma asfixiando mis pulmones,
Susurra simplemente…
Abrázame, por favor…Amor Mio.